Atención Temprana
Durante los primeros años, el desarrollo de los menores requiere la adquisición de diversas habilidades motrices, cognitivas, lingüísticas, sociales y de autonomía.
Este desarrollo se inicia desde el embarazo, siendo un proceso muy complejo y ligado a la evolución del sistema nervioso, pero muy influido por las condiciones del entorno.
El desarrollo resultará más o menos exitoso en función de las características biológicas de cada menor, las actuaciones de sus cuidadores principales y las experiencias que tenga con su ambiente. Así pues, se encuentra muy condicionado por factores biológicos (genéticos o enfermedades) y psicosociales que interactúan entre sí. Cualquier alteración en alguno de ellos puede provocar retrasos en el desarrollo e incluso llevar a una situación de trastorno de diferentes tipos: cognitivo, motriz, sensorial, emocional, del lenguaje, de la conducta, o bien un trastorno generalizado en el desarrollo.
Servicios que ponemos a tu disposición
- Evaluación adaptada a cada etapa del desarrollo
- Identificación y diagnóstico diferencial
- Asesoramiento a docentes y familias
- Tratamiento Individualizado y en grupo reducido de bebés y niñas/os con:
- Parálisis cerebral
- Deficiencias auditivas
- Deficiencias visuales
- Retraso en la adquisición de habilidades motrices
- Retraso en la adquisición de habilidades del lenguaje y la comunicación
- Retraso en la adquisición de habilidades cognitivas
- Retraso en la adquisición de habilidades y hábitos de autonomía
- Trastornos generalizados del desarrollo
- Síndrome de Down
- Retrasos en el desarrollo (no mantiene la mirada, no se desplaza, no camina, no sonríe, mantiene reflejos que ya deberían de haber desaparecido…)
- Atención Preventiva a bebés y niños/as considerados de riesgo por:
- Prematuridad: menos de 37 semanas
- Postérmino: más de 42 semanas
- Bajo peso al nacer: menos de 2500 gramos
- Bebés de alto peso: más de 4500 gramos
- Gemelos
- Trillizos
- Embarazos patológicos: pérdidas, infecciones virales (SIDA, hepatitis, rubeola, varicela, herpes…)
- Traumatismos
- Hijas/os de madres con enfermedades metabólicas: hipotiroidismo, diabetes, hemofilia
- Hipotensión/hipertensión severa de la madre
- Hipoxia fetal
- Insuficiencia placentaria
- Niños nacidos de partos complicados
- Inmigración, Adopción y acogimiento.